jueves, julio 19, 2007

sin título

Un cielo rojo avecina la tragedia
que será tu muy pronta muerte.

Las tan dulces nubes rozan los árboles
que llenos odio gritan el daño
que les haz hecho.

Los animales se retuercen de dolor
y gritan en la tierra
pidiendo que la muerte llegue
y los libere de este inicuo dolor.

Los humanos solo saben hacer daño
nos perjudican, nos asesinan,
nos quitan lo que por derecho nos fue concedido,
nos roban el poco amor que podemos poseer.

Pero nosotros venceremos,
llegará el día,
saldremos de la oscuridad
y se oirán los gritos de libertad.

Los humanos caerán para nunca más levantarse,
sufrirán, serán castigados,
esos los hijos de Eva.
Eva que sólo parió envidia y discordia.
Ellos, sus hijos,
que trajeron la desgracia a este mundo.

Nosotros nos vengaremos y ellos sufrirán
bajo la espada de Caín
y nosotros, sus hijos, saldremos de las tinieblas
para, por fin, vivir en paz, por fin, por siempre.