Ya no más sombras y tristezas
la candidez de tu mirada
envuelve mi suave ser.
La oscuridad queda perpleja
ante tu ignota presencia.
Las cadenas arrastradas,
los lienzos gastados.
Las varillas yacen tristes y solitarias
es que ya no me interesan
Encontré una nueva
forma de sufrir.
Te encontré a ti.
Ahora que todos duermen
mi agnosia perpetuidad
temblará y te encontrará
y sabrá que ya tiene fin.
Ahora te amaré y
descansaré en paz.